Y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es

Toda gloriosa es la hija del rey en su morada, de brocado de oro es su vestido

Mas al extraño no seguiran, sino huiran de él, porque no conocen la voz de los extraños

Y te daré a comer la heredad de Jacob tu padre

Y los tuyos edificarán

las ruinas antiguas, los

cimientos de generación

y generación levantarás,

y serás llamado reparador

de portillo, restaurador de

calzadas para habitar.

Aunque por nacimiento tenemos una nacionalidad, en nuestra vida cívica también podemos agradarle

Pero yo y mi
casa serviremos
al Señor.

Está alguno alegre: Cante alabanzas

La palabra de Cristo more

en abundancia en vosotros,

enseñándoos y exhortándoos

unos a otros en toda 

sabiduría, cantando con 

gracia en vuestros corazones

al Señor con salmos e himnos

y cánticos espirituales.

El limpio de mano y puro de corazón, el que no ha elevado su alma a cosas vanas ni ha jurado con engaño

Y el espíritu de todo el resto del pueblo, y vinieron y trabajaron en la casa de Jehová de los ejercito, su Dios

Y bendecirás al Señor tu Dios por la buena tierra que te ha dado

Tierra en la cual no

comerás el pan con

escasez, ni te faltará

nada en ella, tierra

cuyas piedras son

hierro, y de cuyos

montes sacarás cobre.

Y el Espíritu es el que da testimonio; Porque el Espíritu es la verdad

Está mi alma apegada a ti; Tu diestra me ha sostenido

Manto de alegría en lugar de espíritu angustiado

El temor del Señor es limpio que permanece para siempre

Ciertamente el bien y la

misericordia me seguirán

todos los días de mi

vida y en la casa de

Jehová moraré por

largos días.

Porque si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa el lugar de simple oyente ¿cómo dirá el Ámen a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho

Desde Sión te bendiga Jehová El cual ha hecho los cielos y la tierra

Bendíganos Dios, y témanlo todos los términos de la tierra

Bienaventurado el que tú

escogieres y atrajeres a ti,

para que habite en tus 

atrios; Seremos saciados

del bien de tu casa, de tu

santo templo.

Lo pastoreo con la pericia de sus manos

Bienaventurado el hombre

que tiene en ti sus fuerzas; 

En cuyo corazón están tus

caminos.

Cuan amable son tus moradas Rey de mi salvación

El que es enseñado en

la palabra, haga participe

de toda cosa buena al

que lo instruye.

Adorno de gracia dará a tu cabeza; Corona de hermosura te entregará

No la dejes, y ella 

te guardará; Ámala

y te conservará.

En la multitud de consejos se afirman los pensamientos

Pero ahora se ha manifestado la justicia de Dios

Siendo justificado 

gratuitamente por su

gracia, mediante la

redención que es

en Cristo Jesús.

Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón dentro de mi

Hermanos, si alguno fuere

sorprendido en alguna falta,

vosotros que sois espirituales,

restauradle con espíritu de

mansedumbre, considerándote

a ti mismo, no sea que tu

también seas tentado.

Porque lo que provocas en otros hoy es tu siembra del mañana

Sabiendo que el

bien que cada uno

hiciere, ése recibirá

del Señor, sea

siervo o sea libre.

Y te llamarán Ciudad deseada no desamparada

Restauraré tus jueces como

al principio, y tus consejeros

como eran antes, entonces

te llamarán Ciudad de justicia,

Ciudad fiel.

La vida es un regalo de Dios y para Dios

A estos cuatro muchachos

Dios les dio conocimiento e

inteligencia en toda las letras

y ciencias, y Daniel tuvo

entendimiento en toda visión

y sueño.